Cristal
El cristal opal o translúcido permite pasar la luz pero de forma matizada, acentuando la calidez de los ambientes y siendo utilizado en lámparas desde siempre. Paradójicamente, la etimología de la palabra cristal proviene del “Kryos” griego que alude al frío y a la formación del hielo. En la naturaleza, los cristales se forman a partir de gases a presión en el interior de cavidades rocosas y es precisamente este proceso el que determina su calidad, tamaño, color y forma.
El vidrio, por el contrario, es un tipo de material cerámico que se obtiene a 1500 °C a partir de arena de sílice y otros materiales.
El vidrio ha estado presente en las luminarias desde la invención de las lámparas de petróleo. Tulipas, ampollas, bombillas y tubos fluorescentes no habrían sido posibles sin él. El vidrio es un elemento crucial en las lámparas que se ha ido adaptando a los progresivos requerimientos técnicos y térmicos.